Primera actuación

Julio de 2019


 

Con el dinero que iba ahorrando me compré un “hide” portátil y demás cosas “necesarias” para comenzar a prepararme para el otoño.

Cuando tuve todo listo, mi primer paso en el mes de julio fue ir a un sitio que ya conocía donde los buitres solían ir a comer. Ese día llevé desperdicios de carnicerías para echar a los buitres y poder fotografiarlos. Legué al sitio con mi padre y colocamos el hide en una zona con buenos fondos. Echamos los 4-8 kilos de carne y nos metimos al aguardo, mientras algunos buitres nos observaban. Los buitres se acercaban a las inmediaciones, pero no llegaban a comer. Con el paso de las horas nos dimos cuenta de que el problema era el hide, ese bulto en medio de la campa les asustaba y no se atrevían a acercarse.


Grupo de buitres leonados alimentándose.

Mientras me encontraba tumbado en el pasto, algunos buitres me observaban, pero seguían comiendo.

Finalmente salimos y lo desmontamos. Mientras íbamos al coche a dejarlo, decenas de buitres comenzaron a bajar. De manera desesperada, decidí que me iba a acercar a fotografiarlos. Con movimientos suaves y poco a poco, conseguí acercarme a unos 20 metros de los carroñeros. Al principio estaban algo tensos, pero al ver que no había peligro, siguieron comiendo. Estuve disfrutando de este espectáculo unos cuantos minutos hasta que acabaron con la comida. Después, alzaron el vuelo y desaparecieron.


Buitre leonado a punto de aterrizar en el comedero.

Fue la única imagen que conseguí de un buitre volando durante la sesión.


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