Pasó el tiempo, y llegaron mis 15 años. Se desmontó mi vida por completo, sólo estaba pendiente de quedar con mis amigos y ligar. En eso se centraban mis energías. Seguía con otros intereses, pero no con el entusiasmo de los años anteriores. Esta etapa que duró hasta los 18 años, me sirvió de aprendizaje. He aprendido mucho sobre el comportamiento humano, y me ha servido para hacer mi camino, con muchas cosas aprendidas.
En esos años no dejé la fotografía en ningún momento. Hacía sesiones a personas, fotografías de deporte, etc. De hecho, con 17 años es cuando hice por primera vez un curso de manejo de cámara. Hasta entonces, todas las fotografías que había hecho eran en automático y sin ningún conocimiento básico. Seguido a ese curso me compré una cámara réflex, que es la que utilizo actualmente. También me compré un teleobjetivo pensando en volver a salir algún día al campo con él. Y seguido a estas compras, comencé un curso fotográfico de un año entero donde hice varios tipos de fotografía. Fue la clave para entender la base de la fotografía y coger experiencia con mi cámara.